Bienvenidos al ayuno de 2011 para el período de arrepentimiento. El tema de este año es: “la Reedificación y la Restauración”, y se enfocará en el libro de Nehemías. Pero comenzaremos dando un vistazo al contexto histórico para entender mejor.
Contexto
El pueblo de Dios había caído en cautiverio y exilio. ¿Por qué Dios permitió eso? Por su desobediencia. Durante cien años, el Señor envió profetas llamándolos al arrepentimiento, pero no escucharon. El cautiverio no sólo fue el resultado de su desobediencia, sino que la única forma en que entenderían. Para entonces, Israel estaba dividido en dos reinos. Las 10 Tribus del Norte fueron llevadas cautivas por los asirios, y luego fueron dispersadas y se asimilaron entre las naciones paganas a donde fueron. El Reino del Sur (Judá, Benjamín y Levi) siguieron el mal ejemplo de sus hermanos del norte (Jer. 3), y finalmente fueron llevados cautivos por Babilonia. Estos son los judíos, que a diferencia de sus hermanos del norte, lograron guardar su identidad. Esta es la parte del pueblo de Israel que tuvieron la oportunidad de regresar a su tierra.
Dos Tipos de Cautiverio
En la Biblia vemos dos tipos de cautividad que ha sufrido el pueblo de Dios: a. La Esclavitud en Egipto.
Los Hijos de Israel cayeron en esclavitud en Egipto por el simple hecho de haber nacido allí. En un sentido espiritual, ésta es la esclavitud al pecado con la cual todos nacemos.
(Juan 8:33) Le respondieron: Simiente de Abraham somos, y jamás fuimos esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: Seréis libres? (34) Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo: Todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado. Todos hemos pecado, pero podemos ser libres de esta esclavitud cuando creemos en la sangre del Cordero de Dios (Rom. 3:23-26).
(Rom. 6:16-18) ¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis; ya sea del pecado para muerte, o de la obediencia para justicia? (17) Mas a Dios gracias, que aunque fuisteis esclavos del pecado, habéis obedecido de corazón a aquella forma de doctrina a la cual fuisteis entregados; (18) y libertados del pecado, vinisteis a ser siervos de la justicia.(Rom. 6:22-23) Mas ahora, libertados del pecado, y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santidad, y por fin la vida eterna. (23) Porque la paga del pecado es muerte; mas el don de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.
La salida de Egipto y el camino por el desierto ejemplifican nuestra salvación y el camino de transformación hacia un nuevo hombre.
Pero luego que el pueblo de Israel llegó y se estableció en la Tierra Prometida, lamentablemente ellos se alejaron de Dios. Su desobediencia y su falta de arrepentimiento los llevaron a otro tipo de cautiverio…
b. El Cautiverio en Babilonia.
A pesar de décadas de mensajes proféticos y advertencias, el pueblo de Dios no se arrepintió. Como consecuencia, Dios permitió que los babilonios los conquistaran y los llevaran cautivos. En un sentido espiritual, éste es el cautiverio en el que los creyentes pueden caer si pecan y no se arrepienten; si tienen “ídolos” que ocupan el lugar de Dios. Lo engañoso de este cautiverio es que puede esconderse detrás de la religiosidad, con apariencia de piedad, pero con pecados ocultos.
Los libros de Esdras y Nehemías hablan de la salida de este cautiverio. Es la salida de Babilonia, y el retorno a Sión. Éste será el tema de este ayuno.
Tema del ayuno: Reedificación
En ayunos pasados nos hemos enfocado en el tema del arrepentimiento. Hemos analizado nuestras vidas en busca de pecados ocultos para arrepentirnos y pedirle al Señor que nos sane y nos libre. “Arrepentirse” en hebreo es: “teshuvá”, que literalmente significa: regresar. Es un regreso a Dios, a la forma en que Él quiere que hagamos las cosas y que vivamos. Este año, el enfoque del ayuno será: la reedificación (en sentido espiritual: la restauración).
¿Hay algo en tu vida, en tu familia, que se encuentre en ruinas o destruido por el enemigo? ¿Hay alguna área en la que te sientes cautivo—que quieres cambiar, pero no puedes?
Puedes estar seguro que el Señor quiere sanarte, restaurarte y traer libertad. Conforme el Señor vaya trayendo sanidad a tu corazón, también te ayudará a reedificar lo que haya sido destruido.
Lee los siguientes versículos de Isaías, y luego ora usando estas escrituras como inspiración:
(Isaías 61:1-4) El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ha ungido Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel; (2) a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados; (3) para ordenar a los que hacen duelo en Sión, para darles gloria en lugar de ceniza, óleo de gozo en lugar del luto, manto de alegría en lugar del espíritu angustiado; y serán llamados árboles de justicia, plantío de Jehová, para que Él sea glorificado. (4) Y reedificarán las ruinas antiguas, y levantarán los asolamientos primeros, y restaurarán las ciudades arruinadas, los asolamientos de muchas generaciones.
Lo que cayó en ruinas…sea reedificado;
Lo que fue asolado…sea levantado;
Lo que fue arruinado…sea restaurado.
(Jer 33:7-9) "Restauraré el bienestar de Judá y el bienestar de Israel y los reedificaré como eran al principio. (8) "Los limpiaré de toda la maldad que cometieron contra mí, y perdonaré todas las iniquidades con que pecaron contra mí y con las que se rebelaron contra mí. (9) "Y la ciudad será para mí un nombre de gozo, de alabanza y de gloria ante todas las naciones de la tierra, que oirán de todo el bien que yo le hago, y temerán y temblarán a causa de todo el bien y de toda la paz que yo le doy."
ResponderEliminarDónde o cómo hago para leer cada uno de los cuarenta días de ayuno. Gracias bendiciones
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