domingo, 9 de septiembre de 2012

HABÉIS OÍDO...PERO YO OS DIGO (B)


(Día 22)

Hoy seguimos viendo las menciones que Jesús hizo de ciertos mandamientos, y su llamado a ir más allá de la “letra de la ley”…

*  Mandamiento: “No cometerás adulterio”
(Mateo 5:27)  Habéis oído que se dijo: "No cometerás adulterio." 



Este también es uno de los Diez Mandamientos:
(Exodo 20:14; Deut. 5:18)  No cometerás adulterio.
[Otras referencias: Levítico 20:10; Deuteronomio 22:24; Proverbios 6:32.]

Jesús no niega este mandamiento, sino que va más allá, advirtiéndonos que la acción comienza con la intención:
(Mateo 5:28) Pero yo os digo que todo el que mire a una mujer para codiciarla ya cometió adulterio con ella en su corazón.

El Señor nos reta a ver la intención del corazón, no sólo la acción física. El adulterio comienza en el alma, cuando uno abre espacios a pensamientos impuros.  Si uno corta el pecado de la codicia en el corazón, uno podría frenar y evitar el adulterio. 
(Mateo 5:29-30)  Y si tu ojo derecho te es ocasión de pecar, arráncalo y échalo de ti; porque te es mejor que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea arrojado al infierno.  (30)  Y si tu mano derecha te es ocasión de pecar, córtala y échala de ti; porque te es mejor que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo vaya al infierno. 

¿Será necesario cortar un miembro del cuerpo para evitar pecar?  Lo más seguro es que no habrá necesidad de hacerlo si “cortamos” el pecado interno, en la mente y el corazón. Si nos viene un mal pensamiento, debemos arrepentirnos de ello, antes que se convierta en acción.
(Santiago 1:14-15)  Sino que cada uno es tentado cuando es llevado y seducido por su propia pasión.  (15)  Después, cuando la pasión ha concebido, da a luz el pecado; y cuando el pecado es consumado, engendra la muerte.

(Hechos 8:22)  Por tanto, arrepiéntete de esta tu maldad, y ruega al Señor que si es posible se te perdone el intento de tu corazón. 

*  Ley: Carta de Divorcio
Luego de hablar del adulterio, Jesús aprovecha para hablar del tema del divorcio. 
(Mateo 5:31)  También se dijo: "Cualquiera que repudie a su mujer, que le dé carta de divorcio." 



Esto es en referencia a la siguiente ley:
(Deuteronomio 24:1-4)  Cuando alguno toma una mujer y se casa con ella, si sucede que no le es agradable porque ha encontrado algo reprochable en ella, y le escribe certificado de divorcio, lo pone en su mano y la despide de su casa,  (2)  y ella sale de su casa y llega a ser mujer de otro hombre;  (3)  si el segundo marido la aborrece y le escribe certificado de divorcio, lo pone en su mano y la despide de su casa, o si muere este último marido que la tomó para ser su mujer,  (4)  al primer marido que la despidió no le es permitido tomarla nuevamente como mujer, porque ha sido menospreciada; pues eso es abominación ante el SEÑOR. No traerás pecado sobre la tierra que el SEÑOR tu Dios te da por heredad.

En tiempos de Jesús, las cortes religiosas daban autorización para divorciarse por cualquier motivo, no sólo por infidelidad.  Ellos se excusaban diciendo que “estaba contemplado en la ley”, pero ése no era el espíritu de la Ley. 

En el Sermón del Monte, Jesús explicó:
(Mateo 5:32)  Pero yo os digo que todo el que se divorcia de su mujer, a no ser por causa de infidelidad, la hace cometer adulterio; y cualquiera que se casa con una mujer divorciada, comete adulterio.

Jesús señaló que el divorcio no es parte del plan de Dios; más bien, es consecuencia del pecado del hombre y la dureza de su corazón.
(Mateo 19:3-9)  Y se acercaron a El algunos fariseos para probarle, diciendo: ¿Es lícito a un hombre divorciarse de su mujer por cualquier motivo?  (4)  Y respondiendo Jesús, dijo: ¿No habéis leído que aquel que los creó, desde el principio los hizo varón y hembra,  (5)  y añadió: "Por esta razón el hombre dejará a su padre y a su madre y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne"?  (6)  Por consiguiente, ya no son dos, sino una sola carne. Por tanto, lo que Dios ha unido, ningún hombre lo separe.  (7)  Ellos le dijeron: Entonces, ¿por qué mandó Moisés darle carta de divorcio y repudiarla?  (8)  El les dijo: Por la dureza de vuestro corazón, Moisés os permitió divorciaros de vuestras mujeres; pero no ha sido así desde el principio.  (9)  Y yo os digo que cualquiera que se divorcie de su mujer, salvo por infidelidad, y se case con otra, comete adulterio.



ORACIÓN
SEÑOR, tú me has escudriñado y conocido; desde lejos comprendes mis pensamientos y conoces bien todos mis caminos.  Escudríñame, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis inquietudes.  Y ve si hay en mí camino malo, y guíame en el camino eterno. 

Ayúdame a frenar el pecado desde el inicio. Me arrepiento aun de mis malos pensamientos y el intento de mi corazón.  Estoy determinado a sacar toda codicia de mi alma, para no serle infiel a mi pareja, de pensamiento ni de hecho.   Tampoco quiero dar espacio al divorcio en mi corazón, porque no es Tu voluntad para el matrimonio ni las familias. Mi deseo es vivir como Tú mandas, según el modelo del Reino de los Cielos.  

[Salmo 139:1-3, 23-24; Hechos 8:22]   

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