sábado, 14 de diciembre de 2013

ORIGEN DE LA NAVIDAD III: Otras Costumbres

En las últimas publicaciones hemos estado hablando sobre el origen de la Navidad.  No sólo Roma y Babilonia contribuyeron a las tradiciones que se celebran en la Navidad.  También hay muchas costumbres escandinavas y germánicas que se han popularizado alrededor del mundo para esta celebración.

Yule
YULE
Así como los romanos antiguos, también los pueblos bárbaros del norte de Europa celebraban el solsticio de invierno.  Ellos realizaban una semana de fiesta conocida como “Yule”, basada en la mitología germánica y escandinava.  Esto se practicaba aún antes del nacimiento de Cristo, y mucho antes de que estos pueblos fueran cristianizados. 

La enciclopedia virtual Wikipedia la describe de la siguiente manera:
Yule constituía sobre todo una fiesta de la familia y estuvo siempre dedicada a la fertilidad, a los solsticios y a la familia. Era una festividad donde también se recordaba a los ancestros, los amigos ausentes.  La mesa donde se celebraba la fiesta se preparaba con esplendor y magnificencia, ante la tumba de los parientes fallecidos, priorizando la hospitalidad hacia los forasteros.”

Entre las tradiciones de Yule están las siguientes: 
Cortaban un tronco gigante de madera, y lo hacían arder por horas.  Luego las cenizas eran esparcidas por los campos para hacerlos fértiles.  Además del tronco que quemaban, también cortaban un árbol verde que ponían dentro de la casa.  Decoraban las casas con muérdagos y colocaban guirnaldas en las puertas de hogares para invocar poderes de fertilidad.

Para Yule, las familias nórdicas se reunían en sus casas, y permanecían despiertos toda la noche, hasta que saliera el sol.  Otros salían a recorrer el pueblo cantando.  En cada casa que pasaban, brindaban a la salud del árbol y lo mojaban con sidra y dejaban muffins sobre sus ramas.  Posteriormente, cuando estos pueblos se cristianizaron, pusieron manzanas en lugar de los panecillos, aduciendo que era el árbol del Jardín del Edén. 

Los germanos y escandinavos celebraban el 26 de diciembre como el día del nacimiento de Frey, dios nórdico del sol naciente, la lluvia y la fertilidad. En esas fiestas adornaban un árbol verde, costumbre que se transformó en el árbol de Navidad cuando llegó el cristianismo al Norte de Europa.

El término Yule aún sobrevive en muchos villancicos (en inglés), y en el pastel confeccionado para esas fechas conocido como “Yule log” (tronco de Navidad).

REGALOS
Hoy en día, las actividades de la Navidad están muy enfocadas hacia los niños, y gira en torno a los regalos.  Ya habíamos mencionado que la costumbre de intercambiar regalos se remonta a los tiempos de los Saturnales.  Para justificarlo, la iglesia relacionó esta costumbre con los regalos que los sabios del Oriente llevaron a Jesús cuando nació.  Por ello, en algunos países los regalos no se dan en Navidad, sino en el “Día de los Reyes” (en enero).

Sin regalos, no hay Navidad.  Esto ha provocado un consumismo extremo a fin de año, que es muy alimentado por los comerciantes. El afán es tal que mucha gente no sólo gasta todo lo que tienen sino que se endeudan comprando regalos.  


SANTA CLAUS
caricatura de Santa (1863)
El personaje más famoso de la Navidad es Santa Claus, conocido también como “Papá Noel o San Nicolás”.  Es una figura mítica a quien se le atribuye la entrega de los regalos en la Navidad. 


La leyenda moderna de Santa Claus se remonta al año 1820.   Su imagen de un hombre regordete de barbas blancas, vestido de rojo con bordes blancos y un cinturón negro fue popularizada por una caricatura norteamericana (1863). 

Se cree que la creación de esta figura navideña fue inspirada por un personaje real llamado Nicolás, que vivió en Turquía.  Él venía de una familia adinerada, pero al morir sus padres repartió su herencia entre los pobres, y dedicó su vida a la iglesia.  Él llegó a convertirse en obispo, y fue conocido por ser muy generoso, especialmente con los niños.  Después de morir, fue reconocido como el santo patrón de Grecia, Turquía y Rusia.

Por otro lado, hay un gran paralelo entre la figura de Santa Claus y el dios germánico Odin.  Se creía que durante la fiesta de Yule, el dios Odin salía a cazar, montado en un caballo con ocho patas.  Él cabalgaba por los cielos de forma similar a Santa Claus con sus venados.  Según la tradición germánica, los niños llenaban sus botas con zanahorias, heno y azúcar para alimentar al caballo de Odin.  Luego, el dios les dejaba regalos y dulces en sus botas.  Pero si los niños se portaban mal, un demonio que acompañaba a Odin raptaba a los niños y se los comía. 

La “mentira de Santa Claus”
Todos sabemos que la figura de Santa Claus es mítica.  No existe en realidad, sino sólo en la imaginación.  Todos sabemos esto…excepto los niños.

Algo muy preocupante sobre el tema de Santa Claus es la “mentira blanca” relacionada con este personaje. En las familias que celebran la Navidad, los padres les dicen a sus hijos que Santa Claus les trae los regalos, haciendo de él un héroe.  En los días previos o en el mismo día de la celebración, los padres llevan a sus hijos a tomarse la foto con Santa. 

La existencia de Santa Claus es una mentira socialmente aceptable, y universalmente defendida.  Quien se atreva a decir la verdad es atacado por los padres que han creado en las mentes de sus hijos una fantasía en torno a este personaje. 

Lo que no se ponen a pensar los padres es la desilusión que traen a sus hijos cuando ellos descubren la verdad.  Sin darse cuenta, los mismos padres están atentando contra su propia credibilidad ante sus hijos.  Los hijos no medirán la “buena intención” de los padres, sino que se preguntarán: “Si mis padres me mintieron en esto, ¿en qué más lo habrán hecho?  Y si ellos lo hicieron, también lo puedo hacer yo.” 

Esto es algo muy serio.  

Mañana saldrá publicada la última parte de este estudio sobre los orígenes de la Navidad…

2 comentarios:

  1. santiago astete19/7/13 03:24

    muchas gracias por la historia quisiera saber tambien donde aparece en la biblia la palabra nativitas??? gracias estoy aprendiendo mucho

    ResponderEliminar
  2. muy interesante, gracias

    ResponderEliminar